martes, 11 de octubre de 2011

Capítulo VI

DEL PUNTO DE VISTA DEL PRODUCTOR DE IMÁGENES SOBRES SUS OBRAS


El hecho de que cada imagen sea producida por un individuo único y singular no se convierte en un problema más que si nos interrogamos sobre la atención que el historiador debe prestar a la ideología de dicho individuo con el fin de emprender una explicación científica de las imágenes producidas por él.

1. La ideología de la obra es una ideología en imágenes
la ideología global y personal del "artista" no es análoga a la de una de sus obras. En segundo lugar, incluso la región estrictamente estética de la ideología global del "artista", la "conciencia" que tiene de su trabajo, mientras se mantiene al nivel ideológico, no puede descubrirnos el conocimiento de sus obras, ya que esa "conciencia" no es el conocimiento, sino la percepción ideológica de estas obras. En el caso en que pudiéramos reconstruir de un "artista", esta no puede servir de explicación directa de sus obras. Si bien existe una relación entre el análisis científico de una imagen y la propia imagen, no debemos olvidar que esta ideología es una ideología en imágenes. La ideología estética del "artista" no puede, pues, en ningún caso, ser considerada como el conocimiento inmediato de la ideología en imágenes de sus obras.

II. LA IDEOLOGÍA POLÍTICO SOCIAL DEL ARTISTA NO CORRESPONDE NECESARIAMENTE A LA DE UNA DE SUS OBRAS

sabemos desde el célebre ejemplo de Balzac que nos dio Engels que puede existir incluso una contradicción entre la "conciencia política" de un escritor y la ideología política de una de sus obras.

La primera serie, grabada a fines de 1632, permaneció inédita en vida de Callot, en tanto que la segunda se publicó en los comienzos de 1633. Durante todo este tiempo, "el pobre pueblo estuvo desolado y arruinado por los frecuentes alojamientos de dichos hombres de guerra, que despojaban, saqueaban y violaban, y cometían otros actos de hostilidad, no guardando orden ni contención alguna". ¿Cuál era la ideología política personal de Callot y cuál su actitud ante todos estos hechos?. Félibien refiere que Luis XIII, "habiendo reducido a su obediencia la ciudad de Nancy, mandó en busca de Callot y le propuso representar esta nueva conquista, como lo había hecho con la toma de la Rochela; pero Callot rogó a su Majestad, con mucho respeto, que se dignara dispensarlo de ello, porque era lorenés y no creía deber hacer nada contra el honor de su príncipe y contra su país.

Luis XIII fue considerado por Callot después de la toma de Nancy como un ocupante, Callot grabó monedas para Gastón de Orleán en la época en que este último reunía tropas con Carlos IV para hacerlas marchar sobre París. ¿Cuál es la ideología política que inspira las Pequeñas miserias de la guerra? ¿se debe a esta razón el hecho de que la serie quedará inédita y no se publicara hasta después de su muerte? ¿Era posible tal actitud política en la Lorena de la época? En apoyo de su tesis, escribe Sadoul que "cuando a la guerra encubierta sucedió la guerra declarada, algunos pueblos tomaron las armas y rechazaron en ocasiones con éxito a los mercenarios, cualquiera que fuera el partido a que pertenecieran.

El texto de Sadoul implica precisamente que no había un movimiento campesino, propiamente hablando, en Lorena, en aquella época. El "héroe positivo" de las Miserias de la guerra no es el campesino, como cree Sadoul, sino el soldado. El moralismo de Callot reside en el hecho de que denuncia los excesos inútiles e inhumanos, independientemente de aquel que los comete.


Consideremos ahora la gran serie publicada en 1633. contradicción entre la ideología política personal de Callot y la de sus aguafuertes es todavía más notable si nos atendemos a la explicación de Sadoul. Esta tesis plantearía de nuevo el problema de su fidelidad a Carlos IV a que se refiere Félibien, así como su colaboración, fuera de duda, cuando grababa la moneda. "El último grabado muestra, cetro en mano y corona en la cabeza, a un joven soberano a quienes los ministros distribuyen condecoraciones y honores". 

Si no se tiene esta idea fija en la cabeza, se verá muy claramente que las Grandes miserias y desdichas de la guerra son una obra de propaganda política en favor del ejército, demostrando las desdichas del oficio de soldado y abogando por la moderación en cuanto a la utilización de la violencia. Como quiera que sea, puede afirmarse una cosa: que no se debe confundir la ideología política personal de un artista con la ideología política de ciertas imágenes o series de imágenes de carácter político producidas por él. Si el origen de clase de un artista no explica el estilo de sus obras, tampoco lo explica su conciencia política. Por eso a la crítica burguesa le gusta el marxismo vulgar,y por las mismas razones por las que trata de seguir ignorando lo más posible las obras que no encajan en este esquema.

Comentario:
En este capítulo se recalca mucho sobre la ideología de las imágenes, y sus diferentes puntos de vista y aceptación que tuvo en la sociedad, así como también rechazo, nos deja claro también que cuando se habla de la ideología político social del artista, no se refiere  a la ideología política de sus obras.  habla mucho de la burguesía también como en los capítulos anteriores, todo se ha basado entorno a ello, y lo que piensa esta clase siempre ha sido lo que más resaltan, existen muchos puntos de vista, unos que se contradicen y otros que son aprobados.

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